HABLEMOS DE: YURU CAMP, LA COMODIDAD Y LA COMEDIA

La comodidad, algo que sin duda nos gusta a todos, estar calmados, relajados, y a gusto. Y la comodidad es algo que Yuru Camp es experto en dar. Yuru Camp, o como muchos de nosotros los conocimos, el anime de las lolis cutes haciendo campismo, habla de Rin Shima, Nadeshiko Kagimihara, y compañía van de campamento. En general ese es todo el argumento que se puede decir. No tiene nudo, no tiene problemas, no tiene cosas que hagan fluir el argumento, pero aun con tanta simpleza, me sigue sorprendiendo la manera en la que simplemente es. Podríamos decir que su categoría de Slice of life prácticamente a eso se dedica, poner personajes en un lugar y simplemente dejarlos ser.

Aun con esas, el Slice of life sigue teniendo esa necesidad de darnos algo, de mantener nuestra atención, y para esto recurre a la comedia. Yuru Camp nos lo muestra con sketch de comedia o situaciones graciosas que son bastante genuinas. Pero lo que destaca es en su forma de usarla, la cual no es tan exagerada, pero tampoco tan suave.

Es por eso que series como Danshi Koukousei no Nichijou (Daily Lives of High School Boys) a pesar de ser un slice of life, se siente más como si fuera una comedia. Porque no podemos negar que el protagonista, o por lo menos uno de los protagonistas, Tadakuni tiene una vida bastante tranquila, pero luego llega todo el elenco de protagonistas y personajes secundarios y convierten la serie en un festival del humor. Y no me malinterpreten, esta serie es muy buena, es una gran serie de comedia, pero con toques de slice of life.

Volvemos con Yuru Camp, el hecho de ser bastante sencilla y que funcione, hace que destaque bastante en el contenido que ofrece. Y bueno, yo no voy a negar que hay bastantes situaciones muy cómicas a manos del elenco de personajes, sobre todo de Nadeshiko y Chiaki, las cuales tiene una perspectiva de disfrutar y de hacer cosas alocadas en el momento. Lo que es Rin y Aoi están un poco mas neutrales, pero siguen teniendo su chispa.

El punto al que quiero llegar es que la serie deja fluir toda la trama sin tapujo, pero tambien sin presiones. Y su tratamiento de la comedia es bastante bueno sin llegar a lo absurdo o demasiado exagerado. Esto me recuerda a el mismo uso que Non Non Biyori le da a su comedia, buena, pero tampoco se nos va de las manos porque de lo que hablamos es de cuatro chicas en un pueblito, donde no pasa demasiado. Igual Yuru Camp, que nos dice que los campamentos con amigos son divertidos y pasan cosas emocionantes, pero que esto no deja de ser un grupo de campistas en la montaña, y de aquí no nos vamos a mover.

Al principio hablamos de la comodidad y mencione que Yuru Camp es bueno dándola. Es más, me atrevería a pensar que la serie es una de las más Comfy o relajante que hay, y la única razón por la que creo eso es por su ritmo. Yuru Camp avanza lento, se detiene en muchas situaciones donde los personajes hacen lo suyo y nada más. Puedes sentirte dentro de esas situaciones y ser atrapado por la relajación del momento o no encontrar el interés y aburrirte.

No quisiera sonar repetitivo, puesto que más que el Moe que hay, Yuru Camp brillara por el ritmo que lleva, el cual no va a toda prisa, pero tampoco esta estático. Si algo pudiese resaltar es la gran cohesión que tienen sus personajes que poco a poco se va creando. Al principio de la serie las chicas en su mayoría son desconocidas, poco a poco se van acercando y conociendo, hasta formar el grupo. Pero esta “trama” de irse conociéndose pasa muy, pero muy por debajo de las situaciones en general.

Y si la serie no te ha gustado, siempre puedes comprar el sartén oficial de la serie.