AMOR VIOLENTO: SUPER PSYCHO LOVE
Todos estamos familiarizados con el concepto de Violencia en el Noviazgo o en la Pareja, ya que nos ha tocado ser testigo de algún caso (o incluso vivirlo), pero ¿qué tan conscientes estamos de la presencia e impacto que tiene esta problemática a nuestro alrededor? Si nos detenemos a pensar, el amor violento es una de las clases de amor más vendida, a veces de manera no muy disimulada, por diferentes industrias, incluyendo la de la ilustración. Antes de pasar a analizar dos ejemplos de esta clase de amor que, no sólo son famosos, sino que son queridos por su audiencia, idealizados e incluso son considerados un modelo a seguir por sus respectivos fans, hay que determinar el perfil de los participantes de lo que se considera un amor violento. Los psicólogos conductistas sostienen que, en esta clase de relaciones, el abuso físico intermitente crea un vínculo de apego traumático en la víctima, es decir, que el maltrato provoca amor en la pareja golpeada. (Orlandini, 2010) En este tipo de relaciones tenemos dos perfiles: el del abusador y el de la víctima; el primero se caracteriza por una intensa dependencia afectiva a su víctima, la incapacidad de estar solo, la necesidad de control sobre su pareja, así como las actitudes posesivas y celosas; y el segundo es una persona que desarrolla dependencia afectiva a su golpeador, acepta un sistema de valores que faculta a su verdugo a castigarla y se responsabiliza por los males de su pareja. A palabras de Hurlbert y Apt (1993), estas personas tienen un mayor apego a la ideología tradicional del matrimonio patriarcal, así como una concepción anticuada y rígida del género: el masculino ordena mientras que el femenino sirve y obedece.
CASO 1 - HARLEY QUINN Y THE JOKER
Tal vez sea una de las parejas antagónicas más famosas e idealizadas de los cómics, en especial del Universo DC. La fama de esta pareja se disparó con el lanzamiento de Suicide Squad en 2016, cuando, deliberadamente, la relación del Guasón y Harley Quinn se modificó y tergiversó para presentarnos a una pareja lunáticamente enamorada, cuando en realidad, tanto en las series animadas como en los cómics, es completamente diferente. El personaje de Harley, creado por Bruce Timm y Paul Dini, a diferencia de muchos personajes, no nació en el cómic y fue adaptado a la serie animada, sino al revés, siendo su primera aparición en un episodio de Batman: The Animated Series (1992), donde se ganó el aprecio del público, adquiriendo importancia, al grado de que la industria DC le ha dedicado tirajes y sagas completas de películas, series animadas, cómics y es incluida en casi todo proyecto donde el supervillano de Batman aparece. Harleen Frances Quinzel era una psiquiatra en el hospital de Arkaham, donde estaba internado The Joker y fue asignada a este para tratarlo como su psiquiatra personal. A partir de ese momento, la doctora ha sido presa de la manipulación, a diferentes niveles, del payaso, llevando a la querida Harley a ser víctima, tanto en las series como en los cómics, de humillaciones, golpizas, mutilaciones, laceraciones, encierros, torturas y demás maltratos, que convenientemente fueron omitidos en la representación de esta pareja en la pantalla grande. Definitivamente, Harley y The Joker no son un modelo de pareja a seguir, ya que es la representación de un amor enfermizo, violento y dependiente; lo sorprendente, es que es una de las parejas de la industria de los cómics y de la ilustración narrativa más querida.
CASO 2 - KILLING STALKING
No obstante, hay que señalar que el amor violento no es exclusivo de las parejas heterosexuales. Los perfiles del abusador y de la víctima son exactamente los mismos en una pareja homo que hetero; lo que nos marca la pauta para identificar cual es cual es encontrar a la persona que ha asumido el rol posesivo, y quien el rol culposo. Un pequeño reflejo de una relación enfermiza, violenta, así como francamente perturbadora, es la del manga surcoreano Killing Stalking. Este manga, escrito e ilustrado por Koogi, comenzó a publicarse en 2016; su fama se debe principalmente a su temática oscura de manipulación psicológica y una cruda representación del abuso psicológico y físico. Por un lado, tenemos a Boom Yoon, un chico con una personalidad disminuida, tímida y antisocial, que se obsesiona con Sangwoo, un chico de personalidad atrayente, atractivo e inteligente, al grado de seguirlo a su casa todos los días, hasta que se decide colarse en esta, solo para descubrir que la persona que había idealizado era un psicópata, torturador y sádico que tiene personas en su sótano. Sangwoo lo descubre, y encierra a Boom Yoon en ese sótano, convirtiéndolo en su siguiente víctima. Todo parece ser un thriller psicológico como cualquier otro, hasta que, conforme la historia se va desarrollando, la víctima se enamora realmente de su captor, creando una dependencia afectiva, y cuando tiene la oportunidad de escapar, no lo hace. En el caso de Sangwoo, también desarrolla una dependencia más que enfermiza por su Boom Yoon, porque no sabe cómo convivir con él de otra manera que no sea a base de golpes y torturas. La historia es muy buena como thriller psicológico y como un claro ejemplo de una relación violenta. Lo malo o peligroso de esta es que la audiencia, al momento en que el origen del sadismo de Sangwoo es revelado o Boom Yoon explica sus sentimientos, empatiza con los personajes, justificando y romantizando esa relación.
Si a todas luces, casos como el de Harley Quinn y como el de Boom Yoon están mal, ¿por qué son tan amadas por la audiencia? Cuatro palabras: la mitificación del amor. Este suceso es perjudicialmente frecuente en la industria del cine, la animación, la ilustración y la narrativa literaria, normalizando conductas negativas que, de verlas en la realidad, a todas luces queda claro que está mal, pero que se minimiza el impacto cuando creamos un producto artístico. Esto ocurre porque desde que somos niños, somos bombardeados con dos ideas que son socialmente aceptadas, reforzadas y, a la larga, interiorizadas, por el usuario o consumidor, y se vuelven tan comunes que pierden el componente de choque, dando como resultado tanto la creación como aceptación e idealización de personajes que sostienen relaciones tóxicas, enfermizas e incluso violentas. Las ideas que componen la mitificación del amor son: “el amor todo lo soporta y lo puede todo”; y la segunda, el deseo de ser objeto de un amor incondicional que esté dispuesto a todo, reforzando la idea anterior.
Uno de los objetivos tanto del diseño como de la creación de personajes es ofrecerle al usuario un ícono con el cual puede identificarse y una historia en la cual pueda involucrarse; sin embargo, esto debe ser utilizado o encausado a romper estereotipos o situaciones dañinas, no a reforzarlas. Un personaje o una historia no es mala por incluir características negativas en su personalidad y/o en el storytelling, porque eso construye y complementa la historia. Pero esto si se vuelve negativo o un punto de alarma cuando la sociedad, los fanáticos o la historia misma intenta justificarla e incluso los convierte en modelos a seguir, porque entonces, en lugar de romper el círculo vicioso, se recae en la mitificación del amor y aumenta la posibilidad de tener un Super Psycho Love.
Fuentes de Información:
Hurlbert, D. y C. Apt (1993) "Sexual narcissism and the abusive male."
Orlandini, A. (2010) El Enamoramiento y el mal de amores.
Comments